Una vez allí me acerqué a la chica de la cafeteria y le dije:
-¡Un vaso de leche para el principe Anami!- En Perrolandia la leche era el mejor nutriente de todos, podia curar cualquier mal y reponia muchos HPs.
Derrepente me dí cuenta de que la chica me miraba con forma muy rara, eran mis pintas... o definitivamente ¿Olia mal? No quise preocuparme por eso y esperé a que me sirviese el vaso de leche.
Depsués de darmelo apoyé mi espada en uno de los bancos que habia para sentarse y me senté al lado como de costumbre, sin preocuparme por nada más, empece a beber la leche.
Como de costumbre no pagaba nada nunca xDD
Poco después me fui para mi habitación, me estaba entrando el sueñito.