Me acababa de levantar, y no tenía demasiada hambre, asi que no fui a la cafetería.
Decidi ir a las máquinas expendedoras a ver que podían ofrecerme.
Tardé en decidirme, pero por fin decidí meter unos cuantos yenes, y escogí un refresco bien fresquito y un sandwitch vegetal, que tenía
muy buena pinta.
Cogí mi comida y me senté en un banco que había al lado y me puse a comer.